EQUIPOS
DE INVESTIGACIÓN DE ENFERMERÍA DE URGENCIAS: UNA
OPCIÓN VIABLE |
Juan
Manuel Carballo Caro, Raúl Núñez López, Daniel
Aragón Suárez. |
Servicio
de Urgencias. Hospital Virgen del Rocío. Sevilla |
La investigación en enfermería presenta tres grandes problemas
para un enfermero que presta su actividad en un servicio de
urgencias: poco tiempo para la investigación, escasos recursos
disponibles y falta de formación. Nuestra experiencia en la
creación de un equipo de investigación en el servicio de
urgencias del Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla
demuestra que es posible una producción científica óptima a
pesar de estos inconvenientes.
PALABRAS
CLAVES: Investigación, producción científica, trabajo en
equipo.
Los profesionales de enfermería de urgencias que realizan algún
tipo de producción científica tienen ante sí grandes
dificultades: escasez de recursos económicos para asistir a
actos científicos, depender únicamente de los propios medios
técnicos, sobrecarga de la demanda asistencial que impide la
elaboración de proyectos durante la jornada laboral, y
dificultad para compaginar la actividad investigadora con la
vida diaria fuera del trabajo, entre los más destacados.
Estos inconvenientes hacen que la producción científica
durante la vida laboral de un enfermero sea esporádica,
escasa y a veces incluso nula. Como muestra de ello, en
el año 2005, en el servicio de urgencias del Hospital
Universitario Virgen del Rocío (HUVR) de Sevilla, que
tiene una plantilla de 52 enfermeros, sólo se realizó
una comunicación científica (1).
La posibilidad de formar un equipo de investigación
permanente, capaz de coordinarse, supliendo con la
fuerza de el grupo las carencias individuales, se revela
como una manera acertada de enfocar un problema al que
muchos profesionales no han logrado dar una adecuada
solución en solitario. Consideramos que los requisitos
indispensables de los integrantes de este equipo fueron
el sentir curiosidad por lo que le rodea y una gran
motivación personal (2).
Un equipo de investigación de enfermería permanente es una
opción viable que generará más producción científica que la
realizada por el resto del personal del servicio de urgencias.
En noviembre del año 2005 dos enfermeros del servicio de
urgencias, decidieron formar un equipo de investigación al que
más tarde se incorporaría su coordinador. Los medios técnicos
fueron el equipo informático de los propios enfermeros y el
disponible en el área de clasificación. Las principales horas
para dedicar a la producción científica serían las del turno de
noche, por haber una menor actividad asistencial, o las que se
pudieran conseguir fuera del horario laboral. En cuanto a
recursos económicos el presupuesto inicial era de “0” euros, a
lo que habría que añadir la aportación que se pudiera conseguir
de los representantes farmacéuticos. La filosofía de nuestro
equipo sería el asumir como un reto constante el descubrir
maneras nuevas y mejores de dispensar unos cuidados basados en
nuevos conocimientos y pruebas obtenidas mediante la
investigación (3).
Se planteó como objetivo general la formación y la
adquisición de experiencia en las diferentes facetas del
proceso investigador que se tradujera en una producción
científica permanente, y como objetivo específico
realizar en el año 2006 una producción científica
equiparable a la registrada en la memoria del servicio
de urgencias del año 2005.
Se realizó una evaluación cuantitativa y de la
relevancia de los trabajos desde diciembre del 2005
hasta noviembre del 2006. De forma cuantitativa sólo se
han tenido en cuenta los trabajos científicos admitidos
en congresos, jornadas y publicaciones relacionadas con
la enfermería, donde el primer comunicante, la idea
original y la mayor parte de su desarrollo sean de un
miembro del equipo de investigación. Este dato se
comparó con los registrados en la memoria de servicio de
urgencias en el año 2005. También se comprobó la
actividad científica del resto de la unidad en el año
2006.
Para evaluar la relevancia de los resultados, se tomó
como referencia el baremo de la bolsa única de
contratación del Servicio Andaluz de Salud (SAS) por ser
la escala oficial utilizada por la administración en
nuestro área de salud(4); dicha escala además puntúa la
importancia del medio donde se dio a conocer dicha
comunicación (ver tabla 1).
Como se puede apreciar en la tabla 1, el equipo de investigación
ha realizado una producción científica que supera de forma
significativa la realizada en la unidad en el año 2005 y 2006,
incluso de la suma de ambos años. También se comprueba un
notable incremento de la puntuación del baremo del SAS. Además
de los datos medibles, hay que destacar una serie de elementos
sin cuyo análisis sólo daríamos una visión parcial del equipo
que hemos formado.
El uso de Internet ha sido clave para la adquisición de
conocimientos relacionados con la investigación, y
búsquedas bibliográficas, así como el uso de los
sistemas informáticos hospitalarios. Es un aspecto
negativo que el uso de Internet en nuestro hospital esté
restringido para el personal de enfermería. Gracias a
algunos miembros del personal facultativo, que nos
cedieron sus claves informáticas, pudimos aprovechar el
tiempo disponible en el horario laboral en la búsqueda
de datos, facilitando así gran parte de nuestro trabajo
investigador. El conocimiento de las diferentes fuentes
científico-sanitaria existentes en la red ha sido
imprescindible (5), desplazando de forma importante la
búsqueda bibliográfica tradicional.
Fue de gran importancia la integración del coordinador
del servicio de urgencias como tercer miembro del equipo
de investigación, pues ha facilitado la información
sobre eventos científicos, mejor vía de comunicación con
los servicios de imprenta y formación continuada del
hospital, así como para activar recursos como cursos y
jornadas gratuitas, así como el abaratamiento del coste
de congresos mediante el apoyo de los representantes
farmacéuticos.
Como factor más negativo en este año 2006 destaca el
acoplamiento del personal con plaza fija del concurso
extraordinario del SAS del año 2003. Esto ha implicado
un gran número de traslados y de cesiones de contratos,
llegando a desmembrar la unidad durante dos meses y
anulando la presentación de dos producciones científicas
este año.
Por último hay que comentar que el equipo de
investigación no ha funcionado como un monopolio de un
grupo reducido. Muestra de ello fue la petición de
colaboración a otros miembros del servicio de urgencias
en el artículo publicado, así como las dos
comunicaciones regionales. De esta forma el equipo de
investigación no sólo beneficia a los propios miembros,
sino a todo el servicio de urgencias en su conjunto.
Desde nuestra experiencia, un equipo de investigación
permanente es una opción viable, que genera un nivel
óptimo de producción científica a pesar de la escasez de
recursos.
Creemos que los recursos existentes no lo están para
todos los profesionales, como ha quedado claro con la
dificultad para conseguir una clave para poder acceder
al uso de Internet. Desde aquí reivindicamos el derecho
a que la labor investigadora en enfermería reciba más
apoyo de la administración, y a la necesidad de actuar
ante una situación que, desde nuestro punto de vista,
puede ser considerada a veces, discriminatoria.
La necesidad de una mayor implicación de las jefaturas
de enfermería por incrementar la oferta de formación en
investigación y disponibilidad de recursos, se muestra
como pieza clave para impulsar la investigación en
enfermería. Pero la realidad es que hasta que llegue ese
día, el verdadero motor de la investigación es la
motivación del propio personal de enfermería .
1-Memoria del servicio de urgencias del hospital
general Virgen del Rocío de Sevilla. Año 2005.
2-Consejo internacional de
enfermería. La investigación de enfermería: instrumento
de acción.
http://www.icn.ch/matters_researchsp.htm
3-FUDEN.
La fase preliminar en un proyecto de investigación en
enfermería.
http://www.funden.es/FICHEROS_ADMINISTRADOR/Aula/tema_investig.PDF
4-Servicio Andaluz de Salud. Baremo de la Bolsa Única
para la categoría de enfermería.
http://ws035.juntadeandalucia.es/ayuda_baremo.php
5-Cristina Bojo Canales, Mª
Pilar serrano Gallardo. Las búsquedas bibliográficas:
¿qué hemos aprendido? Metas de enfermería julio/agosto
2006; 9(6): 56-58.
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