Ciberrevista SEEUE




IV Época: Noviembre-Diciembre 2013. Nº 34

Comité Editorial

  • DIRECTORA:
    Carme Vila Gimeno Hospital del Mar, Barcelona.
  • SUBDIRECTOR ADJUNTO:
    Juan Manuel Carballo Caro Hospital Virgen del Rocio, Sevilla.
  • VOCALES:

    Daniel Aragón Suárez Hospital de Puerto Real, Cádiz.

    M. del Rosario Arnao Loyaga Hospital Capio sur, Alcorcón.

    M. del Rosario Arnao Loyaga Hospital Capio sur, Alcorcón.

    M. Ángeles Rivera Vizcaino Hospital Virgen del Rocio, Sevilla.

    Carlos Torralba Ruiz. Hospital Universitario Infantil Niño.

    Valvanera Cordón Hurtado Hospital San Pedro, Logroño.
  • MAQUETACIÓN:
    Maribel Delgado Carreras
  • ISSN: 1579-5527
    Depósito Legal: J-316-2004

Editorial

Para que la enfermería existiera y evolucionase hicieron falta heroínas como Nightingale, Henderson, Dorem, Leininger y un largo etcétera, todas ellas fueron depositando su granito de arena en esta profesión que fue creciendo convirtiéndose poco a poco, grano a grano en una inmensa playa donde la mayoría de la humanidad debe acudir en algún momento a lo largo de su vida. Así se llegó a construir nuestra profesión paso a paso, poco a poco, empezaron las cuidadoras, las parteras, siguieron los practicantes, se formaron los ATS, se llegó a las Escuelas Universitarias consiguiendo la Diplomatura, un gran paso adelante, y ahora ya se estudia en las Facultades Universitarias y se tiene acceso al doctorado.

Pero la enfermería en general, no está satisfecha, no está a gusto, vemos a diario personas jóvenes, recién incorporadas al mundo laboral y por tanto al trabajo enfermero, que sufren el síndrome del burnout o síndrome de agotamiento laboral, se convierten en personas que piden y piden mejores puestos de trabajo, mejores sueldos y algunos, no tantos, más reconocimiento, más respeto, más protagonismo en la asistencia sanitaria en general, pero ¿Qué hacen al respecto?, ¿Cómo contribuyen a ello?, por lo general se limitan a las quejas y al conformismo ¿Porqué?, seguramente porque la situación económica mundial actual no es muy halagüeña, entre otras cosas porque los recortes afectan en nuestro país directamente a los profesionales sanitarios, y si bien es cierto que los que se beneficiaban de tener un contrato de funcionario, disfrutaban de tres meses al año de vacaciones y de quince pagas, actualmente esto no es económicamente sostenible para ninguna empresa y menos para un sistema sanitario público. Era necesaria una reestructuración.

Somos trabajadores y como tales nos deben tratar y sí, se nos debe tener en cuenta porque nuestro trabajo lo realizamos con personas enfermas, trabajamos con seres humanos y muchas veces cuando estos seres humanos tienen en peligro su vida y es por eso que estamos obligados a demostrar el valor de nuestro trabajo, a nivel práctico sí, pero sobretodo a nivel intelectual, y para ello es por lo que existen las sociedades científicas, unas sociedades, las de enfermería, que somos invisibles ante el Gobierno de la Nación, porque tan sólo estamos representados por un único sindicato (que no se considera representativo de la mayoría del colectivo enfermero) y el Consejo General que tiene una actuación de partido político y pocos son los que se sienten representados por él, pero estos mismos grupos que se supone representan al colectivo enfermero, son los que mantienen excluidas a las sociedades científicas cuando se deben debatir temas relacionados con la profesión, y esto ni es normal ni coherente.

Ya va siendo hora que las sociedades científicas se manifiesten, que sean representativas de los diferentes campos de trabajo que tiene la enfermería, pero para ello es absolutamente necesario que se incorporen profesionales, dispuestos a aportar tiempo y ganas para conseguir que esta maquinaria siga funcionando, para que las sociedades científicas de enfermería sigan adelante, a cambio tan sólo de la satisfacción personal que suele fluir cuando el colectivo escucha y sigue los consejos que se dan desde las sociedades, con tan sólo la satisfacción de ser un grano de arena más que en un futuro tan solo recordará un pequeño colectivo, pero con la satisfacción de formar parte de esta inmensa playa y créanme el esfuerzo habrá valido la pena.