Ciberrevista SEEUE




IV Época: Marzo - Abril 2017. Nº 54

ATENCIÓN ENFERMERA EN EL PACIENTE PEDIÁTRICO INTOXICADO

Autoría

LAURA BELTRÁN JIMÉNEZ

ESPERANZA VERDUGO ROMÁN

Resumen

Actualmente debido a lesiones, accidentes o a las diversas enfermedades que existen, son cada vez más numerosas las situaciones fortuitas de sufrir la pérdida de una parte del cuerpo.

Algunos estudios afirman que este suceso es debido al envejecimiento de la población, que presenta por la edad problemas crónicos, otros manifiestan que se deben al creciente uso de maquinaria industrial originando accidente laborales, al número de desplazamientos, que ocasionan accidentes de tráfico y a la masiva práctica de deportes de riesgo.

Aunque en 2011 se produjeran 1.349 amputaciones traumáticas en España, en la actualidad se ha mejorado el pronóstico para las víctimas que sufren amputaciones, debido al manejo de estas . Por ello es importante informar a la población de los cuidados necesarios que requieren los miembros separados del cuerpo humano, para la beneficencia del paciente.

PALABRAS CLAVE

Intoxicaciones, Pediatría, Enfermería.


OBJETIVO

•Conocer los agentes más comunes implicados en las intoxicaciones medicamentosas no intencionadas de los servicios de Urgencias.

 

METODOLOGÍA

La búsqueda bibliográfica ha sido realizada en las bases de datos: PubMed, google académico y Medline.

Las estrategias de búsqueda que se han llevado a cabo han sido con descriptores como: “Pediatría”; “Intoxicaciones por fármacos”; “Actuación enfermera”, “Intoxicaciones pediátricas”.

 

RESULTADOS

A pesar de su gran prevalencia, no es común encontrar casos de pacientes pediátricos con toxicidad hepática por el paracetamol, eso se debe a la rapidez con que consultan los padres al facultativo para subsanarlo [3].

En 2001-2002, había cerca del 20% de las intoxicaciones no intencionadas en menores de 5 años en las urgencias hospitalarias [4]. Los antitérmicos, son los fármacos más frecuentemente implicados en intoxicaciones destacando, el paracetamol. La ingesta accidental de aspirina o ibuprofeno supone un muy pequeño porcentaje en este grupo.

En los últimos años, se ha detectado un aumento de las intoxicaciones como consecuencia de errores en la dosificación del paracetamol líquido, que parecen deberse a cambios en la jeringa de dosificación.

 

CONCLUSIONES

El tipo de intoxicación más frecuente es por ingesta oral de medicamentos, lo que asociado al grupo etáreo más afectado, existen estudios que demuestran que hay factores predisponentes como la curiosidad del niño a explorar, y la dependencia de quien le cuida [5].

Puesto que el paracetamol, es el antitérmico más prevalente en las intoxicaciones pediátricas el antídoto correspondiente al mismo es la N-Acetilcisteína [2].

En conclusión, tanto el personal de enfermería como el facultativo médico deben estar preparados ante la posibilidad latente de recibir un paciente pediátrico con exposición a una sustancia potencialmente tóxica. Para poder brindarle esa atención adecuada, óptima y de calidad que puede ser la diferencia entre la vida y la muerte [1].

 

BIBLIOGRAFIA

1. Rodgers. G. CCondurache T, Reed M. D., Bestic M., Gal P. Capítulo 58, Intoxicaciones, Nelson tratado de Pediatría 18a .Barcelona, España. Elsevier. 2009. p339-356.

2. Azkunaga B, Mintegi S. Intoxicaciones, medidas generales. [Internet] 2012. [Citado 29 Octubre 2016]. Disponible en: https://www.aeped.es/sites/default/files/documentos/intoxicaciones._medidas_generales.pdf

3. Mintegi S. Manual de intoxicaciones en pediatría. [Internet]. Madrid: AEP Asociación Española de Pediatría; 2012. [Citado 29-10-2016]. Disponible en: http://www.fetoc.es/asistencia/intox_manual_pediat_3.pdf

4. O. Zubiaur, J. Salazar, B. Azkunaga, S. Mintegi, Grupo de Trabajo de Intoxicaciones de la SEUP. Ingesta de psicofármacos: causa más frecuente de intoxicaciones pediátricas no intencionadas en España.An Pediatr (Barc). 2015;83(4):244---247.

5. Raso Mintequi A J, Benito Fernández M A, Vásquez Ronco: Intoxicaciones en urgencias: cambios epidemiológicos en los últimos 10 años. Anales españoles de pediatría. Vol 56. Nº 1 2002.