TERCERA ÉPOCA
Nº 24 Marzo - Abril de 2012    

 

VOZ ENFERMERA:

EL FENOMENO DE LAS DUDAS

 

¿Cómo percibimos el mundo que nos rodea? ¿Cuál es nuestro modo de estar en él? Son preguntas que nos resulta complicado contestar y crean desasosiego a la hora de responder, ya que son cuestiones que no frecuentamos hacernos….o por lo menos, yo, en el momento que me tropecé con esta propuesta y rebotó en mi mente cómo algo insólito. Lo comenté con la gente que me rodea, a ellos también les produjo una sensación de inquietud buscar un argumento para tratar de expresar su opinión, si es que pudieron llegar a hacerlo….

Comienzo de esta forma para introducirnos en el llamativo concepto de la deconstrucción o desaprendizaje.

Nuestras convicciones sobre lo que es “posible o no”, no son nada más que nuestra propia visión del mundo que nos rodea. Sólo necesitamos revisar la biografía humana para ser conocedores de “cuantos imposibles” ya han pasado a la historia.

Desaprender es concedernos una segunda oportunidad de vivir de otro modo, abriendo nuestras mentes a la oportunidad de sentir nuevas vivencias y entrar en contacto con cosas que de otra forma no se producirían.

Desaprender es una grandeza que la vida nos ofrece día a día, para conectarnos con nuestros sueños y llevarlos a la acción.

Como dice Pierre Bordieu: “ La crítica que trae lo no discutido dentro de la discusión, lo no formulado dentro de la formulación tiene como condición de posibilidad la crisis de la objetividad...” Buscar nuevos significados y sentirnos innovadores, pero para eso debemos ejercitar la sospecha sobre aquello que creemos verdadero.

Pero… ¿Cómo sospechar sobre algo que la sociedad ha corroborado como lógico y coherente? Comienza a tener sentido si tomas conciencia de que la sociedad y las instituciones son de nuestra propia creación y que toda “la realidad” que nos rodea es la que nosotros mismos hemos elaborado.

Para poder llevar a cabo ese examen crítico sobre nuestra percepción de la realidad primero debemos desaprender, cómo podría explicar esto, si una de las conclusiones más elementales de la psicología del aprendizaje es que el ser humano “aprende a aprender” ¿Cómo voy a desaprender lo que tanto esfuerzo y años me ha supuesto aprender?

Ciertamente, para conseguir “aprender a aprender” es necesario llevar a cabo anteriormente otro proceso, al que no se le da la debida importancia, un paso imprescindible para alcanzar la innovación que el aprendizaje propone: la oportunidad de “desaprender” algunas certezas que restringen nuestro punto de vista sobre el aprendizaje.

La realidad se puede cambiar, transformar, modificar, renovar… y el aprendizaje nos da esa posibilidad, aprovechemos este momento.

Todas estas reflexiones comenzaron cuando tuve la oportunidad de asistir a unas clases sobre teoría del conocimiento, cuando en la primera clase nuestro profesor afirmo que para aprender debía desaprender lo aprendido me dio rabia. Me sentí estafada. Con lo que me había costado aprender ciertos conceptos, ahora tenía que desaprenderlos, y lo peor era que no tenía ni idea de cómo hacerlo. Si me aferro a lo que sé, no podré aprender nada nuevo y seguiré dando vueltas por paisajes conocidos. Cuántas veces me escucho decir: la misma historia de siempre….

Existen unas rupturas que nos permiten desaprender:

-Ruptura y/o negación de las verdades absolutas: Consiste en suspender el juicio e introducir la duda en la estructura de los pensamientos. Es una fuerte crítica a verdades establecidas y a los modelos tradicionales de vida profesional. “Por ejemplo, Ignác Smmelweiss fue un médico húngaro que consiguió disminuir drásticamente la tasa de mortalidad por sepsis puerperal ]entre las mujeres que daban a luz en su hospital mediante la recomendación a los obstetras de que se lavaran las manos con una solución de cal clorurada antes de atender los partos. La comunidad científica de su época lo denostó y acabó falleciendo víctima de septicemia a los 47 años en un asilo. Algunos años después Luis Pasteur publicaría la hipótesis microbiana y Joseph Lister extendería la práctica quirúrgica higiénica al resto de especialidades médicas. Actualmente es considerado una de las figuras médicas pioneras en antisepsia y prevención de la infección nosocomial o iatrogenia. …”

-Ruptura y /o negación de las miradas únicas y simplificadoras: invita a detenerse, girar la mirada y tomar el propio pensamiento como objeto de análisis, ver desde otro plano, romper con la mirada binaria y disyuntiva del mundo. “Por ejemplo, la idea de que las alteraciones mentales se debían a la posesión por el demonio, desapareció durante la Ilustración, y con ello, también la condición miserable a que eran sometidos esos pacientes. Las alteraciones mentales pasaron a ser enfermedades, y esto constituyó un gran progreso. El psiquiatra más destacado fue Philippe Pinel (1755-1826).

El desaprendizaje es un proceso que no tiene final y es espiral. Es un ciclo de nuevo momentos que, una vez conocido, se va repitiendo de manera constante.

Ahora los lectores se preguntarán que tiene que ver este concepto con la Enfermería, pues bien como profesionales de Enfermería debemos aproximarnos a la realidad que nos rodea, analizar si aquello que realizamos de forma habitual es lo “correcto” o simplemente es lo “que creemos correcto”, reflexionar sobre esas situaciones que consideramos cotidianas deben ser así o podrían cambiarse, descubrir si existen nuevas líneas de actuación, y para ello necesitamos ser capaces de cambiar nuestro enfoque…es decir, desaprender para aprender algo nuevo.

El pensamiento crítico enfermero tiene como base la fundamentación de preguntas y retos ante una situación compleja y el cómo actuar ante dicha situación, por lo que no debe de asustarnos este nuevo concepto.

Enfermeras relevantes de nuestra historia como: Florence Nightingale, considerada la madre de la Enfermería moderna. Orientó los cuidados de Enfermería al control del ambiente para facilitar la recuperación de los enfermos. Virginia Henderson, autora del modelo conceptual basado en las 14 necesidades básicas de la persona. Dorothea Orem, autora de la teoría general del déficit de autocuidado. Todas ellas escribieron textos cruciales en la historia de la enfermería moderna, fueron capaces de romper con las verdades y las miradas únicas de su momento….ahora nos toca el turno a nosotros.

 

Sonia Martínez Quintana, Enfermera.